miércoles, 23 de junio de 2010

CERRADO



Cierro el Blog, ya que mañana es mi último día antes de partir a Kentucky. Estaré afuera un mes...


Pensando...

Ya apenas recuerdo cuantas veces he pensado, mandar todo a la mierda, esta relación , a ti y todo lo que no me gusta de ella, lejos de mi…Venga que los problemas graves no han sido mucho, que de fallar yo he fallado más que tu pues sí….pero y las pequeñas heridas, los pequeños detalles, las 5 ó 10 veces en el día que me haces enojar hasta que quiero estallar por dentro! Seguimos buscando culpables, que si yo, que si tu…pero al final soy la que se queda con estas lágrimas, en este cuarto, sola…tan sola. Detesto sentir miedo de pedirte cosas, de invitarte a salir, de invitarte hacer algo diferente y tu contestación siempre NO…luego soy yo la mala mientras te intento convencer y pongo caras, grito y pateleo, al final contestas “si está bien”, pero no me siento conforme es como si te obligara….Me da paso a pensar en las personas que estarían dispuestas a eso y más si que tuviera que pedirlo, a salir…a divertirse, a regalarme tiempo, a complacerme (porque me voy), sin embargo te escogí a ti y aquí ando rogándote…también soy mala si pienso esas cosas….ya no sé cuantas veces he pensado en dejar todo hasta aquí, acabaría con los malos ratos…pero también nuestra historia y los bonitos recuerdos, que pena que ya casi todo lo lindo es recuerdo.

lunes, 21 de junio de 2010

El papel sigue haciendo ruido

Me estoy empezando a preguntar si alguién realmente lee esto...tan jóven el blog y yo con ganas de cerrarlo, así que como no se si alguien me lee ( holaaa, hay alguién ahí??) pues no tengo ganar de ser cuidadosa con lo que escribo en esta entrada. Son las 2:09 de la madrugada y tengo hambre y para completar no puedo dormir...tengo algo de sueño, que se me quita al momento que cierro los ojos. Mi mente esta hiperactiva y yo solo quiero dormir...mi cuarto obscuro excepto por la luz de mi portátil...ruídos el abánico girando..girando máximo nivel, cortando el aire...y el aire esta moviendo un papel esta haciendo un ruído que esta empezando a estorbarme....me rehuso a levantarme..ni mover el papel, ni girar el abánico. Quiero seguir tirada en la cama...otro ruido, mis tripas, tengo hambre, debería pararme y comer algo...no tengo ganas de pararme. Tengo una lista de cosas por hacer, para mañana, pasado y pasado...antes de irme ( me voy el viernes...) y no acabo de hacerlas, hacer más ejercicios, comprar algo que ya no recuerdo, ir a la universidad a arreglar algunos asuntos, hacer varias llamadas,visitar amigos....

Creo que terminare levantandome, ni el papel, ni las tripas me dejan en paz, bueno luego.

Quiero viajar a España, todos me dicen que no por que ya he ido, pero yo quiero regresar...oler a España nuevamente, quiero regresar a todos los sitios que fui...Andalucía,Sevilla, Toledo, Londres, Roma, Granada, Barcelona....ir a donde no fui, pienso en París.Quiero pasar frío allá, (suena masoquista), quiero sentarme en la Plazita de San Justo en Toledo y fumarme un cigarrillo con una Coca-Cola, quiero pasar las noches caminando las calles,visitando algún bar, viendo los restos de la fiesta de anoche en el maquillaje regado de las chicas en Madrid aún a las 8:00am.....

Ahora solo quiero dormir, cerrar mis ojos y no tener ningún recuerdo, ninguna imágen antes de rendirme al sueño, cerrar mis ojos y no ver desiluciones...tampoco esperanzas. Quiero vaciar mi mente que ese en blanco, no prenguntarme nada, no tener dudas, no saber nada.....


domingo, 20 de junio de 2010

Perdistes

Hay momentos, pequeños instantes en los que te metes en mi cabeza, si tú y tú también, recuerdo todo sin coraje y sin cariño, con pesadez y sabor amargo. Quisiera escupirte las mentiras que dijiste, de la misma forma que me regalaste una vez toda esa palabrería de amor y cariño tan bien disfrazados que mi corazón idiota te creyó. Recuperar todo lo que di, no dejarte ni una gota de mí, porque no lo merecías y no lo vi. Decirte tanto, odiarte tanto, que no llego a nada porque ni siquiera eso mereces, ni mi odio, ni mi amor, ni mis lágrimas ni el recuerdo olvidado en algún lugar. Nada porque eres nada, porque estuviste fugazmente, por tu maldad y por una bondad disfrazada. Eres tú y también tú, porque son tan semejantes, tan iguales, que pensarlo me convierten en una nauseabunda alma…vagabunda…sorprendida de abrir los ojos tarde, feliz de abrirlos en algún momento. Toda tu confusión, tus ganas de tenerme, de hacerme sufrir como tú “sufrías” y también tus ganas de vida nueva, de sueños inconclusos, toda tú basura y tú basura, nadie debe conocerla, nadie debe probar ese veneno. Intentastes una y otra vez, no lograste tus propósitos cualquiera que fueran, perdiste y lo sabes, sin importar donde estés, o donde te escondas.

sábado, 19 de junio de 2010

Y Me Voy...Pero Regreso



Me gusta y a la vez no esta sensación de saber que ya pronto me voy solo quiero que llegue el día pero cuando solo quedan unos días...quisiera ignorar el hecho e ignorar los miedos que se avecinan. Me voy por exactamente 28 días, para mi primer entrenamiento del army como cadete del ROTC, Fort. Knox, Kentucky esta esperandome allá, mientras en silencio preparo mi mente, empaco a ratitos y compro cosas a última hora. Me voy, me lo repito una y otra vez, solo me quedan 4 días..3 días nunca cuento el día antes pasa muy rápido. Así que el jueves 24 a las 3:00 estaré de camino al aeropuerto...7 en el avión...11 en Kentucky. Lo más difícil? las despedidas...saber que pronto dejaras de ver todo a lo que estas acostumbrada, es cuando le das más importancia a las cosas...no es dramatismo, es solo un mes, pero es un mes! Mi familia, amigos, mi perrito, mi amor...es como si todo se fuera desvaneciendo poco a poco. Pero la tristeza no me invade, no por completo, tengo una meta y es dar lo mejor de mi, a eso voy y nada puede opacar ese deseo, de darlo todo allá, me reto a mi misma, me gustan los retos. Y no hay marcha atrás, ni quiero darla, solo esta el futuro y estos dís que se acercan, son la mayor prioridad...mirar hacia delante, no perder el objetivo. Es muy fácil cuando lo ves desde ese punto de vista...No es ádios...sino hasta luego.

viernes, 11 de junio de 2010

Ilusiones indebidas


Me equivoco y cuando más lo pienso más me doy cuenta que lo más que he hecho en esta vida es equivocarme. Quizás porque no le exigí, no le pedí ni pretendí que dejara nada, pero si me hubiera mirado detenidamente…se hubiera dado cuenta.

A veces me siento tan capaz y en momentos como ahora me siento tan pequeña, tan sin importancia….A veces siento que puedo ser todo, que nadie va impedírmelo, que tu vas a verme, a veces como ahora comprendo lo ilusa que soy, comprendo que el amor ciega…que a ti no te ha cegado. Creo que te equivocas o que solo quieres equivocarte, que me ves a veces como si yo fuera no sé que...y yo entre tropezones busco tranquilizarte, hablarte, buscarte y que me veas, que tal vez viéndome, vuelvas a ser…quien nunca fuiste. Te has acostumbrado, todos nos acostumbramos…disfrutas de esta vida y te engañas. Porque me equivoque al verte, al mirarte, me equivoque cuando me gustaste…El corazón también se equivoca, los sentidos, las ilusiones muchas veces son erróneas. Pero por más que me equivoque no caigo, ¿ porqué?, por eso porque al menos me doy cuenta que me equivoco.

Un poco de mí



No pretendo ser mal educada, ¿como no hiba a presentarme propiamente? Ya han leido un poco de lo que escribo, más no me conocen (algunos sí) y tampoco saben las razones de mis motivos para escribir mis pensamientos, sentimientos....todo aquí. Sencillo son esos silencios, en los que solo escucho a mi alma,gritando desesperada, arruñando esa tranquilidad que logro en ocaciones, solo en ocaciones, lo que me hace pensar; !momento! ¿porqué no sacar algo bueno de toda esta miseria? Y es así como rebuscando en un baúl de escritos perdidos y olvidados, dedicados a "personas" y a personas, encuentro un mar de sentimientos, de palabras, que apenas recordaba haber escrito, pero cuando vuelvo a pronunciarlas a leerlas en conjunto, recuerdo el agrídulce de cada historia. Historia, es como mejor puede describirse mi vida, la vida de todos, una historia propia que escribimos nosotros mismos, con la ayuda de otros, para bien o para mal, la historia es nuestra, la vida no siempre lo es...Sin embargo, poco a poco ire editando, corrigiendo, modificando esos fragmentos de esta mi gran historia, mi vida, algunos seran descartados, otros podran leerlos y no por que sean importantes para este corazón, más bien por la riqueza literaria...o estética que yo pueda considerar, me explico, por si alguno reconoce en ellas un personaje o se reconoce asi mismo entre las lecturas, no se sienta más importante de lo que fue, o no fue, en un pasado. Sin emabargo no todos son recuerdos, respiro letras, escribo letras, unas veces tengo más tiempo para escribir que en otras ocaciones así, que derramaré quien soy aquí...haré de este mi refugio para cuando ya nadie crea, para cuando mi techo este inundado de piedras, por que ya muchas han lanzado, sin emabrgo no me han herido lo suficiente para acallar mi voz, para matar mi alma, para bajar mi cabeza, es por eso que hoy me lanzo hacia lo desconocido, sin esperar...

Recuerdo...


Siento el frio de la noche, quebrándome hasta los huesos. En silencio miro al cielo, que lleva la
tristeza en las lágrimas de las estrellas, como si se unieran a mis sentimientos de esta noche. El
aire huele a nostalgia y me acaricia suave la cara, mientras cierro mis ojos y recuerdo todo lo que
se ha quedado atrás en mi vida, todo lo que era presente y hoy es un ayer escrito en páginas
amarillentas, frágiles, guardadas en mi memoria…

Amor entre golpes



Dedicado a todas las mujeres,
que justifican el maltrato
y mueren a manos de su hombre amado.

Cuando desperté en aquel cuarto, era muy poco lo que mis ojos podían llegar a ver. La habitación estaba en penumbras y sólo la vaga luz de unas velas alumbraba la habitación, la tenue luz creaba unas sombras que hacían crecer el miedo que sentía. Yo estaba totalmente desconcertada, mi voz no podía emitir sonido alguno por que el miedo se había impregnado en todo mi cuerpo dominándolo. Cuando traté de hacer algún movimiento me percaté que mis brazos, al igual que mis piernas estaban atados a la ruidosa silla de madera en la que estaba sentada . Mis ojos se movían rápidamente por toda la habitación, aparte de las velas en unas mesas, no había mucho más en aquel cuarto, la puerta que lograba vislumbrar estaba muy lejos de mi alcance y aún sí vencía mi miedo y gritaba por ayuda con la esperanza de ser rescatada, un mal presentimiento me decía que me encontraba muy lejos de un lugar donde pudiera ser escuchada. En la habitación no se oía sonido alguno, sólo el de los rápidos latidos de mi corazón, me atemorizó el pensar que esos mismos latidos
llamarían la atención del secuestrador. ¿Porque estaba secuestrada?, ¿no?. A mis 25 años, yo no confrontaba problemas con nadie, me había casado joven, no tenía hijos por que mi marido alegaba no estar preparado, yo casí no tenía amistades y luego del trabajo regresaba a casa, a cocinar, a mi marido le gustaba que su comida estuviera servida al él llegar, si por alguna razón me demoraba, bueno, el se enfurecía y comenzaba a insultarme. En más de una ocasión me había agarrado por el pelo, haciéndome gritar de dolor. Apesar de sus brusquedades yo lo amaba y sabía que él también a mí, sólo era un hombre criado diferente y yo tenía que acostumbrarme a su manera de ser, si quería que las cosas funcionaran en nuestra relación, al menos eso me decía él. Recuerdo el día que me vio abrazando a un amigo mío de toda la vida, de un jalón me subió al carro y fue el tremendo puñetazo en el ojo que le dio a mi amigo lo que más me dolió. Desde ese día había evitado relacionarme mucho con personas, por miedo a lo que él pudiera pensar o hacerles. Sin embargo no todo eran malas experiencias, amaba cuando sonreía, cuando el día era tranquilo y los dos nos quedabamos en casa. Donde sólo los dos existíamos y las caricias sobraban y entre tanta amargura los besos eran dulces. Sí, el me trataba bien, era yo quien lo provocaba y lo enfurecía con mis estupideces. En la última discusión que tuvimos yo me atreví a contestarle, cuánto me arrepiento de haberle alzado la voz en aquel momento, lo había hecho enfurecer, dándole el derecho a que me golpeara como nunca lo había hecho antes. Aún sentía el dolor en mis costillas cuando lo recordaba y la cicatriz en mi mano derecha que se había negado a borrarse. Estaba como una advertencia de que nunca volviera a levantar la voz a mi marido. Eran sólo dos años los que llevaba casada y ya me estaba acostumbrando a su manera de ser, a veces hasta me gustaba su fuerza y el hecho de que me celara era signo de que me amaba, o ¿no?. Yo estaba segura de que era así, apesar de sus agresiones, insultos o cuando simplemente tomaba mi cuerpo y se hacía de oídos sordos cuando yo le pedía que en otro momento, por que estaba cansada. Y es que...comenzé a escuchar unos pasos detras de mí, aquellos pasos se acercaban lentamente, como alargando el mal momento que sentía aproximarse. Cuando estuvo tan cerca, que pude sentir su respiración tras mi nuca, algo en aquella manera de respirar se me hizo familiar, pero estaba lo suficientemente atemorizada para llegar a conclusiones. Lentamente fue desatando mis muñecas, de la parte posterior de la silla y no fue hasta que se paró frente a mi para desatar mis pies, que pude reconocer al hombre, que me había secuestrado. Aquel hombre que apesar de su dureza , creí yo que siempre me había amado, ahora se le podía distinguir en los ojos un brillo de malicia, que me atemorizaba más que nunca, en mi interior sabía lo que me esperaba. Sin decir una palabra me levanto de la silla como si fuera sólo una muñeca, fue el golpe que me dio contra la pared el que me hizo romper el silencio y gritar más de miedo que de dolor. Sin hacerme caso me abofeteó la cara sin piedad, parando sólo para besar mi cuello de una manera brusca, mis lágrimas se mezclaban con la sangre que ya comenzaba a salir de mi nariz, llegando a mis delgados labios. Fueron muy pocas las palabras que profirió mi marido mientras me arrancaba la vida, las palabras tampoco llegaban claras a mis oídos por que yo estaba demasiado débil. Luego de arrojarme al suelo, con cada patada que me daba en las costillas y el abdomen, yo me arepentía de haber unido mi vida a ese hombre,patada; arrepentimiento, lágrimas y gritos débiles, que él nunca escuchaba y nunca escuchó. Había desperdiciado mi vida, no viví lo suficiente, ni había conocido tanta gente como alguna vez deseé cuando era adolescente, pero ya era muy tarde, mi cuerpo bañado en sangre yacía en el piso y los latidos de mi corazón cada vez más lentos hacían de mí una persona más muerta que viva. Yo no podía ya cambiar mi vida, mi vida acabó, sin razón, sin explicaciones, a manos de un hombre que alguna vez fue el que amé, a manos de un hombre que nunca me amó y que día tras día le justifiqué sus maltratos, sus insultos. En mis últimos momentos trate de olvidar el dolor que sentía, ignore lo que mi marido hacía con mi cuerpo que él creía sin vida, por que aun mi alma le faltaba llorar, no por mí, si no por todas las mujeres que se han comportado como yo, que han aguantado tanto por un hombre, llorar por todas las que han muerto, por todas las que morirán. Por las que apesar de conocer hoy mi historia, no darán el paso para hacer un cambio en su vida. Y un día despertarán como yo, en las sombras, silenciadas por el dolor, atrapadas en un mundo donde ya no hay vuelta atrás.